jueves, 23 de julio de 2009

Difuntos

Esta entrada es más propia del mes de noviembre que de estos calores que invitan al solaz -quizás lujurioso- del veranito, pero ya sabéis que el calendario y mis estados de ánimo fotográficos no siempre coinciden.

Trasteando por blogs he visto muchos tipos de fotografía: paisaje, naturaleza, macro, conceptual, retrato, minimalista, arquitectura, social... y de variadísimos estilos. Pero me faltaba por ver fotografía de difuntos. Y eso es lo que he encontrado en la estupenda entrada del blog de Maya titulado "Fotografía post-mortem", cuya visita recomiendo encarecidamente.

Seguramente alguien me tildará de macabro, pero me ha resultado muy intersante conocer este género fotográfico cuyo lejano esplendor ignoraba por completo. Creo que es también muy ilustrativo sobre la distinta forma en que nos encaramos a la muerte. En nuestra cultura actual, la muerte es un tabú, algo que siempre les sucede a los otros y sobre lo que es mejor pasar de puntillas cuando no queda más remedio y, a ser posible, ignorarlo. Algo que se oculta a los niños y de lo que los mayores no hablan. Como si no fuera absolutamente natural, rigurosamente inevitable y parte de la vida misma.

La Procesión de los Niños

En las procesiones de semana santa, entre el rigor de los trajes, la seriedad de los semblantes, la exaltación de la tortura y muerte, el do...